martes, 17 de marzo de 2009

De paso.

He comido muy rápido para poder robar estos diez minutillos y sentarme a dejaros unas líneas.

Me apetecía saludaros, que vierais que estoy bien. Hace mucho que no escribo pero es porque no paro un momento en casa, cosa de la que no me voy a quejar. EL se ha quedado por aquí (ya lleva más de tres semanas) y cuando salgo del curro me voy a buscarlo y salimos por ahí, a pasear, al cine o a tapear. El caso es que estoy más tiempo fuera de casa que dentro. Y lo noto, lo noto en el cansancio-entre el trabajo y las salidas, me paso la mitad del tiempo que me caigo de sueño- y lo noto en que soy más fuerte. Soy más fuerte para tirar con los problemillas del día a día y para sobrellevar el estrés.

Al principio, la primera semana semana que estaba EL por aquí, me sentía genial, era pura euforia. Ahora que la euforia ha pasado y empezamos a llevar las cosas como rutina, como algo del día a día, siento que es más facil afrontar las cosas que vienen si puedo desconectar un rato cada día y sentirme arropada por EL. De esto no me doy cuenta si no lo pienso detenidamente. Pasan las cosas y ni me fijo. Pero luego me paro a pensar en porqué no he tenido la necesidad de desahogarme, en porqué tengo siempre ganas de hacer cosas, en porqué siento que puedo con más y está claro por lo que es.

Lo unico que siento es que EL no está teniendo las cosas faciles esta temporadilla y no sé como puedo ayudarle. Ni siquiera sé si puedo. Estos días siento como cuenta más conmigo. Como se desahoga un poco más conmigo. Aunque suele preferir tragarse las cosas, creo que para no preocupar a nadie o incluso para no pensar más en ellas. Supongo que hay veces que no puedo hacer más que escucharle y prestarle mis brazos. Ojalá sirva de algo.

Por otra parte, tengo muuuchas ganas de colgaros unas fotillos de este ultimo mes. Tengo una supercamara que me regalaron en Navidad (no profesional, que conste) y aunque sea patetica como fotografa tengo la suerte de haber presenciado momentos chulísimos y algunas fotos han quedado bastante decentes (para ser mías, claro). En algunos de esos ratos me acordé de ti, yaves, y pensé que me encantaría que tu y tu camara estuvierais ahí para poder hacer justicia a la foto. Pero bueno, me conformaré con mis malas dotes.


Un besillo para todos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

hay ganas de verlas, seguro que te han quedado muy bien además...

últimamente aunque no lo creas e intentado hacerme unas fotos en compañía y no me salen, porque no me da el brazo para alejar la cámara más jaja, voy a tener que pedir que nos las haga alguien.

bessetes

Angel dijo...

Seguro que le sirve de mucho.... Y ansioso por ver esas fotos jejeeje..

Mara dijo...

Qué bien pequeña. Cuánto me alegro de leerte asi de contenta. Espero que sea lo que le pase a tu Él, se le pase pronto y puedas ayudarle mucho mucho :) Un beso muy grande y, de verdad que me alegro un montón

Anónimo dijo...

Hola. Escribo desde Zaragoza. He visto en un viejo post de este blog que habláis de Ana Medem y de un cuadro suyo. Ese cuadro está en mi casa, en el cuarto de estar. Ana era una gran amiga nuestra. Me ha emocionado verlo en este blog y leer los comentarios que le dedicastéis. Yo duermo bajo un enorme pez que me regaló y preside mi habitación.
Un saludo y un recuerdo, llega el mes de abril.
Olivier Vilain